miércoles, 17 de diciembre de 2014

Thank you for hearing me

Ultimo dia en Costa Rica. Me levanto sin prisas pues hoy no tocan pedales. Desensamblage de la bici, compra de regalos, y visita a la catedral y al museo de Jose Figueres Ferrer, descendiente de catalanes que siendo presidente de Costa Rica, tuvo la valentia de aboler el ejercito.

Mezcla de bajon por el fin del camino, y de satisfaccion por haber escrito otro capitulo en mis memorias.

Pocos paises como Costa Rica deben concentrar en tan poco espacio, tal variedad de entornos naturales y tanta diversidad de microclimas.
Un grato recuerdo vuelve conmigo, de este pais de cuestas imposibles, de rios en el camino, de nubes y volcanes esquivos, de playas de postal, de animales curiosos y de gente cercana y sana.
Solo me ha faltado una semana de turismo mas estandar, para visitar con calma lugares que solo he visto de paso o he pasado por alto, y otros aun invisibles a las guias turisticas que la gente que he encontrado de camino me han dado a conocer.

Gracias a quienes me hayais estado escuhando durante esta ruta en solitario, por motivarme a escribir cada dia las sensaciones vividas.

martes, 16 de diciembre de 2014

A kind of magic

Utimo dia de bici. Salgo muy temprano para llegar a San Ramon.
Puedo deshacer el camino de ayer, hoy en bajada, o aventurarme por una ruta que arranca direccion norte, avanza hacia el oeste y vuelve al sur entre dos parques naturales. La opcion B se que no la puedo acabar por mi mismo... pero ya saldra la manera.
Bajada del Poas disfrutando la pista que ayer hice de forma asistida.
Ya orientado al norte, donde esperaba un carretera transitada y poco vistosa, topo con una pista asfaltada, sin apenas trafico, que se aventura otra vez por el bosque humedo tropical, en convivencia con la perpetua neblina. El esfuerzo de ayer me permite hoy dejarme caer en descenso por estos parajes.
Alto en el camino para ver unas cataratas. Estan dentro de un complejo que permite ver toda la fauna local. Pago la entrada, en sabiendas de que ver a un jaguar o un puma entre rejas, me doleria en lo mas hondo. Apenas los veo dos minutos.
Aviario, serpentario y monos. Pero las gratas sorpresas son el mariposario, donde se permite a sus inquilinos vivir en practica libertat y con facil acceso a la comida,y sobretodo el patio de colibris. Estos estan aqui por interes te quiero Andres; viven en total libertat y se aprovechan del alimento gratuito que les proporcionan los cuidadores del parque. Parece que mas que traerlos a ellos al parque, han traido el parque a ellos.
Acabo visitanto las cataratas... nada mal.
Toca seguir bajando. Un momento magico. Ya en el fin de mi trayecto, me llega la recompensa inherente al esfuerzo de estos dias y a esta forma noble de vivir el camino. Mi mente se libera para disfrutar cada kilometro de este regalo para la vista, que se tiene que ver en persona pues las imagenes no le hacen justicia.
De repente un grupo curioso. Primera foto con zoom para no asustarles yo a ellos.
Se acercan ellos a mi... se acercan mucho. Seran curiosos? Uno intenta trepar por mi pierna. Ya caigo! A mi espalda llevo uno de los sadwiches que me prepararon ayer... todo vuestro antes que me dejeis la pierna en rojo sangre.

Llego a San Miguel. Pregunto por la pisa de regreso direccion sur. Ufff, al principo es bastante llana, pero al final es muy muy parada. Y es muy sola. Y llueve.
En la parte llana ya empujo la bici. Voy a regresar para coger un bus, pero por suerte Jimmy vuelve de dejar a una clienta. Acordamos un precio. La parte parada de la pista que queria pedaler, no se puede subir ni en primera. Vamos por una alternativa que nos lleva hasta Zarcero, no sin antes parar dos veces a refrescar el motor.
Solo queda bajar hasta San Ramon abriendome paso entre la neblina.
Fin de camino y fin de ruta. Toca madurar sensaciones... y descansar.

lunes, 15 de diciembre de 2014

Happy hour

Me levanto con dolores en todo el cuerpo. Los dias de pedales y el movido trayecto en bote, me ha dejado bastante tocado. Cuesta horrores equiparse con la muda de ciclista y salir a la carretera.
Desayuno un casado (arroz con alubias pintas) en la casa-tienda donde ayer me ayudaron. Saco el fajo de billetes, pero me impiden que lo use. Estoy invitado.
Me despido de la pareja de belgas no sin antes darles las gracias.
Salgo en busca del Poas, en un dia nublado, por unas carreteras secundarias o pistas asfaltadas, por las que se suceden continuos barrios y pueblecitos, que las hacen poco atractivas. Conforme avanzo las sensaciones comfirman mi sospecha; estoy mas que agotado. Casi 4 horas para avanzar 30 kms. Esi si, todo en subida que, aunque ciclable, me hacer mover como si estuviera en modo pajara.
Acabo empujando la bici en una cuesta para nada complicada. Estoy literalmente roto. Doy media vuelta... un atisbo de luz del sol... otra media vuelta y sigo andando.

Un grupo de gente. A ver que se ofrecen.
Llevo ya 1300 metros de ascenso positivo, y me quedan otros 800. Imposible. Llaman para preguntar horarios de buses. Nada. Me despido para bajar a San Ramon, descansar e intentar alquilar un coche.
Flops, al segundo un 4x4 se para a mi lado. Me llevan hasta la entrada del parque, a 800 metros del crater. Una mezcla de desilusion por no llegar por mi mismo y por hacer a motor la parte mas bonita de la subida, pero contento por poder llegar al fin a ver un volcan que ya daba por perdido.
Las chicas de la entrada del parque me cobran como a un local; 2 dolares en lugar de los 15 que me tocarian.

De bajada noto un frio que no esperaba en Costa Rica. Igual es porque estoy a mas de 2000 metros. Paro a comer en un restaurant con vistas al valle de San Jose.
Alquilan cabinas, y sabiendo que en mi estado poco avanzare ya, decido quedarme a hacer unas fotos de la puesta de sol.
Por el precio de la habitacion, me dan de comer y un par de sadwiches para la cena. Hoy estaban todos de acuerdo en mirar por mi economia.

Ocean clouds

Sabado tocaba relax. Me levanto a las 8 despues de unas 11 horas de sueño. Tumbado en la playa se que no me voy a quedar. Me apunto a una salida en grupo para hacer snorkel y visitar isla tortuga. Motor en fase de rodaje. Nos movemos tranquilamente buscando el este, con vistas al litoral que he pedaleado los ultimos dias. Algunas casas y spas de lujo que, segun me comenta una guia, se han apropiado por decreto de algunas playas que se suponen patrimonio nacional. Y que cojones les da derecho? La plata manda aqui, me dice. Menuda sopresa.
Dos horas de snorkel que, hasta cierto punto, me defraudan por lo turbio de las aguas, aun y poder bucear entre bancos de peces. La playa de isla tortuga es un muestrario de hamacas, pero por suerte los guias nos llevan a un rinconcito donde probamos pescado fresco. Excursion mas que correcta y muy buen ambiente de grupo. Delfines a la ida y tortugas de regreso, cuando las nubes se asentaban sobre el oceano.

Domingo salgo de la peninsula de Nicoya, de Motezuma a playa Herradura, en modo narco. En un bote fueraborda empujado por 300 cv. A la llegada reviso si las ruedas de la bici son aun redondas. Las vientos de este 'invierno' tardio, han hecho la travesia mas movida de lo deseable para mi espalda.

Empiezo el pedaleo algo maredo y algo perdido al no tener destino claro. Se que hoy es dia de paso y no toca disfrutar. Asfalto, a las 12 del mediodia, a pleno sol, en subida y con una terrible humedad. Me quema literalmente la piel, y el trafico es horrible. A los 10 kms, poco antes de un puente donde si se pueden ver 'lagartos', me paro a esperar un bus. Un abuelito que lleva a la nieta a San Jose me echa un cable. Para el bus que toca y le explica al conductor hacia donde voy. Me sueltan en una salida de autopista para desviarme ya a pedales hacia Atenas, y de alli intentar llegar a Grecia.
Carretera secundaria sin apendas trafico, donde me parecio ver alguna bagoneta de montaña rusa. Bajadas de risa donde los frenos necesitan ayuda de mis pies para deneter la bici, y sus paralelas subidas de broma donde, incluso empujando la bici, tengo que hacer uso de toda la amplitud de la carretera para minimizar el desnivel haciendo S's.
Asi no llego a Grecia antes de que caiga la noche o sea yo el que caiga. A unos 7kms veo (o imagino) indicadores de un B&B. P'alla que voy. No se muy bien exactamente donde estoy ni donde voy. Pregunto a un grupo. Algo hay pero no me saben indicar como llegar. Hay un laberinto de carreteras y calles secundarias aqui. Facil, voy preguntando a cada persona que encuentro. Doy con el B&B cuando las luces del dia se van apagando.
Puerta cerrada. Llamo al timbre. Me niegan la entrada. Me enojo y suelto un 'estupida' como utlima palabra.
Paro en una casa-tiendecita familiar. Gente humilde que me procura ayuda. Llaman a un chico, este llega y hace otra llamada. Me piden que espere. Mis nervios van a la baja, y al final acabo en una casita que alquilan por temporadas una pareja de Belgas instalados aqui des de el 2005. Los locales me acompañan hasta la puerta, y los belgas me hacen precio de saldo por no estar la casita 'en codiciones'. Al final estoy mas o menos donde queria, despues del triathlon de bote, bus y bici. 'Cerca' del volcan Poas.

viernes, 12 de diciembre de 2014

Many rivers to cross

Samara me ha resultado un pueblecito muy agradable, turistico pero sin excesos, donde los foraneos dan los buenos dias e intentan hablar en español. Tan agradable que me planteo dedicarle un dia de descanso, y mas cuando a apenas 4 kms del centro ecuentras una playa como esta esperando a ser estrenada por hoy...
Pero la noche anterior habia estando re-re-re-re-revisando mi mapa y hablando con unos guias que organizaban rutas en quads y que conocian las pistas de la zona.

El mito de los cocodrilos... segun me han dicho en todos los estuarios del pacifico se pueden, raramente, encontrar... pero no atacan a personas... excepto las hembras en temporada de cria... pero ahora no es temporada... no problemo.
Hoy mi ruta me llevara a cruzar, como minimo un rio.
Et voila, primer paso sin puente... de inicio no pinta muy bien. Pero otra vez coincido con unos repartidores de frutas locales, que me indican un 'paso seco'. Al final es mas divertido y refrescante que otra cosa.

Despues la pista se revela en unas cuesta, costosas de subir incluso mediante la tecnica de arrastre de bici, que me permiten, merecidamente, buenas vistas aereas.
Playa islita insitu, empujoncito, y balcon a playa islita... asi voy listo.
Parada a comer en Corozalito... mas que a comer a beber un litro de zumo de mora mas un litro de agua fresca. Retomo la marcha y siguen las montañas rusas. Entiendo que es el precio a pagar por disfrutar de un pais protector del medio natural, donde son las carreteras las que se adaptan a la montanya, y no al reves.  Y despues del esfuerzo, aunque momentanea, recibo una recompensa. Unos kilometros llaneando y disfrutando a duo con la camara.

Siguiente paso. Esta vez no lo veo nada claro, pero el voluntario de turno estaba al llegar. Un tico tan tico que apenas hablaba español... al estar aislada por rios, esta parte de la ruta se vuelve muy solitaria.
Aqui debo decidir si seguir por pista, o pedalear 3kms por la 'pura playa'. Pero nadie (2 personas) sabe decirme el estado de la marea. Alego a la prudencia y decido no tentar mas a la suerte.
Hasta 3 pasos mas de rio, esta vez ya sin voluntarios locales. Los ultimo 20 kms los pedaleo ya con la unica idea de llegar, harto de las rampas que hace la ruta mas meritoria... igual demasiado.

Al final llego a Montezuma, el destino mas ambicioso que habia planteado para la jornada de hoy. 91 kms que superan con creces la dosis de aventura que venia a buscar a Costa Rica. Mañana toca dia de descanso. A dormir satisfecho.

jueves, 11 de diciembre de 2014

Should I stay or should I go

Madrugon en Marbella. Necessito buscar la forma de reparar los dos pinchazos del dia anterior. Acabo en el escondido taller de Jose y Cola. No se cual de los dos realiza un vulcanizado de lo mas eficiente.

Ya en el hotel cambio la camara y a los pocos segundos, si ni apoyar la rueda en el suelo, vuelve a desinflarse... no me lo creo. Reviso cubierta y llanta por enessima vez. Nada perceptible.
Ultima moneda. Pongo la unica camara sana que me queda. Parece que esta aguanta.
Me pongo en ruta siguiendo las pistas costeras que, hasta llegar a ostional, son un reto para mis ya mermadas fuerzas. El difrute del trayecto se ve limitado por el miedo inherente de un nuevo rebenton. Parada en San Juanillo para comprar parches en la pulperia.
Llego a playa ostional... regalo para la vista y calmante para los nervios.

Paro a comer algo y aprovecho para parchear las camaras pinchadas. Salgo y a los 500 metros vuelvo a oir aire saliendo de la rueda delantera... es impossible!!! Reparo la rueda con la camara que acabo de arreglar. A 3 kms de Nosara de nuevo... pinchazo. Desisto. A punto he estado de rendirme y retirarme. Me siento y me calmo. Persisto y empujo la bici y mis animos los 3 kilometros hasta Nosata en la hora de mas calor... un halo de esperanza en un cartelito oculto que llama mi atencion...
reparan bisicletas :) Espero que bicicletas tambien.
En la tienda consigo dos camaras nuevas. Tampoco el mecanico ve nada raro en el neumatico. Otra situacion que escapa a mi logica. Por suerte, parece que mi rueda delantera solo necesitaba material local. Des de Nosara la cosa ha ido rodado.
Entrar en Nosara es como teletransportarse a California... lo cutre de California, claro. Yankis que se las dan de hippies cuando tendran sus arcas a rebosar de lingotes de oro. Me aborrece este ambiente. Un vistazo a 'su' playa Guiones y me marcho.

A tiro de piedra esta playa Garza, por suerte aun bajo dominio tico. Paro en una casa-restaurant donde una mami me prepara un sadwich y un jugo de piña, mientras de doy un chapuzon para liberar a mi piel de la angustiosa capa de crema solar, antimosquitos, sudor y polvo del camino. Devo oler a rancio.

De alli a playa Samara, otro lujo de pista donde el cansancio fisico no hace ni cosquillas a la sensacion de alegria. Pedaleo esta pista a la hora del dia en la que le entra morriña al sol y se va dejando caer.

Me toca cruzar otro rio, seguramente tan profundo como el de Arenal, pero mucho mas pacifico.Eso si, junto a unos yankis, tengo que ayudar a una parejita de alemanes a sacar su coche barado. Pobretes...
Al final casi 60 kms curtidores que me han ocupado todo el dia, con un inicio surrealita, que ha puesto a prueba mi temple, y un agradable y reanimador final.
Llego a playa Samara, un mix de gente local y americanos... Costa Rica debe hacer algo con urgencia para evitar el hurto de los lugares mas hermosos de su  litoral.